Ellos

Ellos

no conocen

la materia

oscura

del dolor.

Reciben,

tan solo,

sus golpes.


Ellos

no saben

(qué van a saber)

lo que es

deshilacharse,

rasgar la carne,

parir un hijo;

dar amor

como quien da

la vida.


Ellos

no sangran

(lava

subterránea

que brota,

inexorable,

de un tajo abierto

en el tiempo

y que nunca,

jamás,

se cierra)


Ellos van

por ahí

contando sus penas,

como monedas

sucias,

gastadas,

fuera

de circulación.


El miedo los vence.


Y cuando la luz

se ausenta,

a escondidas lloran;

y se marchitan

y envejecen

solos,

siempre solos.


Comentarios

Entradas populares de este blog

Flash

Vidas de papel (fragmento)

Iluminación (pequeño esbozo de una muerte)